En un mercado de vinos que en los últimos años fue creciendo vertiginosamente en variedad, calidad y volumen, como consumidor interesado en conocer y aprender, cada día valoro más la función de las vinotecas especializadas. Estos lugares suelen ser el primer punto donde, a partir de la degustación o recomendación, se puede concretar el acercamiento a las novedades. A ello también me gustaría sumar la relación que se va consolidando entre el vendedor y el cliente: el primero comienza a entender las preferencias y el gusto del segundo, y por eso puede sugerir y colaborar siempre a compras más inteligentes, disminuyendo el margen de error.
En el marco de la movida #ElVinoEnVinotecas, llevada adelante por #BloguerosEnSuTinto, quiero contarles sobre una de las vinotecas que suelo visitar. Se llama Pain et Vin; está ubicada en el corazón del Barrio de Palermo y cuenta con una variada selección de vinos, en su mayoría provenientes de pequeñas bodegas y partidas limitadas, lejos de las etiquetas masivas que pueden encontrarse en supermercados o en las típicas cadenas de vinotecas. Tan o más importante que su selección, es su conductora, Eleonora Jezzi Riglos, dueña y sommelier, una persona muy empapada en el tema. Si bien Paint et Vin abrió sus puertas hace tres años, desde el 2008 que “Ele” —como me gusta decirle— se desenvuelve en diferentes áreas de bodegas, restaurants y vinotecas, en donde adquirió nutrida experiencia, que hoy está a la vista en su proyecto propio.
Para que conozcan algo más a “Ele” y a Pain et Vin, me acerqué a su vinoteca y ella en persona me respondió algunas preguntas:
Yo conozco más a fondo Paint et Vin Vinoteca, pero ¿con qué se pueden deleitar quienes se acerquen y deseen quedarse en el salón, además de ricos vinos?
Abrimos un lugar en el que tuviéramos ganas de quedarnos y de volver. Los vinos que ofrecemos por copa no son producto de tratos con bodegas; abrimos varias gamas y varios tipos de vino por día, seleccionados por nosotros y siempre diferentes. Tenemos la convicción de que la única manera de comunicar estos vinos es descorchando y compartiendo. Podés comprar una botella, tomar la mitad y llevarla. Podes hacer flights (tres medias copas siguiendo diversos criterios, por ej., tres malbec de diferente región o subzona). Esto lo acompañamos con tablas de quesos (individual, para compartir y grande) o variedad de sándwiches y ensaladas, en las que claramente otra vez el pan es el protagonista de la carta.
Por la ubicación, imagino que deben visitarlos un alto porcentaje de turismo
El 75% es turista o “expat”, es decir, personas que son del exterior, pero viven y trabajan en Buenos Aires. Vale destacar que gran parte de ese público llegó por el pan que elaboramos, que es de fermento natural y a leña, único en Buenos Aires.
Hacemos degustaciones privadas con reserva generalmente a personas del extranjero que están viajando y quieren probar un poco de nosotros a través del vino. También, eventualmente, por alguna reunión de amigos, cumpleaños, etcétera. En cuanto a las degustaciones al público, la mayoría son presentaciones de bodegas cada dos semanas, sin día fijo. Otras veces armamos catas más reducidas; por ejemplo, algo especial como puede ser una vertical, no se puede abrir a todo el mundo, y nos gusta llamarla “la mesa chica”. También hacemos la “Escuela de Vinos”, que es a ciegas y por cuatro encuentros, tanto en castellano como en inglés, nivel 1 y nivel 2.
Muchos. Enólogos, gerentes de bodegas, sommeliers. ¿Hay que nombrar? (risas). No quiero. Entre otros, Matías Michelini, Juanma de De Ángeles, Thibault de Lurton, los Rolland, Ernesto Catena...
¿Cómo definís la selección de etiquetas que comercializás?
Vendemos los vinos que nos gustan. Se nota fuerte la mano en la selección. Creo que la sommellerie es en cierto modo una curaduría. Claro que queremos vender, pero no cualquier cosa. Nos gustan los proyectos por sus vinos, claramente, pero también por la gente que los hace, por sus historias, sus anécdotas, porque son auténticos, porque representan el lugar en el que nacen, etcétera. Mantenemos una góndola pequeña donde quien se acerca puede comprar y beber a precio vinoteca, con un mínimo descorche (que no cobramos a los locales), donde el consejo o asesoramiento es bienvenido y hasta necesario. No tenemos vinos que haya en un supermercado.
Entiendo que es una pregunta difícil, Pero ¿podrías elegir cuatro o cinco productores de vinos y darme un motivo por el cual elegiste a cada uno?
De Ángeles, primero; por todo lo que enumeré anteriormente referido a historia, apuesta y, sobre todo, nobleza. También reivindico a Michel Rolland, “a muerte”, por haber apostado y traído a los franceses, y armar esa locura que es el Clos. A los “Miche”, por su audacia y por refundar Tupungato. A Bonomi, porque me emociona todo lo que dice y hace. A los Zuccardi, por creer en el país, y a sus hijos, que están revolucionando nuestra historia del vino.
Vinoteca Pain et Vin
Responsables: Ohad Weiner cheff // Eleonora Jezzi y Pablo Mayaud Maisonneuve somms.
Dirección: Gorriti 5132 (Palermo/CABA)
Teléfono: 4832-5654
Horarios: martes a sábado de 12 a 22 hs / domingo de 12 a 19 hs
Mail: info@pain-et-vin.com
Redes sociales:@painetvin // Instagram ídem // Facebook Pain et Vin Buenos Aires
FERNANDO:
ResponderEliminarNo conozco esta vinoteca, pero me tentaste con la descripción !!
Me la agendo, para mi próximo viaje a Baires...
Buena nota, "cortita y al pie".
Abrazo. ROBERTO