"Vinos de Buenos Aires"

El último fin de semana largo aproveché para disfrutar, junto a mi familia, de la belleza y el paisaje de Sierra de la Ventana. Entre descanso, tranquilidad y naturaleza, no podía faltar visitar alguna bodega. Usted se preguntará: ¿cómo?, si estamos sólo 550 KM de Capital Federal. Así es.


Más precisamente en la localidad de Saldungaray, a 9 km de Sierra de la Ventana, se encuentra la bodega que lleva el mismo nombre. Se trata de un emprendimiento familiar, a cargo del Ing. Agrónomo Manuel Parra, acompañado de sus hijos; el establecimiento es pequeño, con una capacidad de 200.000 litros, entre piletas de hormigón y tanques de acero; posee veinte hectáreas de viñedos propios plantados en el 2003, de las cuales cinco hectáreas son exclusivamente para ensayos.




Demuestra ser un proyecto serio, todo muy cuidado, y además preparado para recibir al turismo. Si mal no recuerdo, todos los fines de semana se realiza una visita guiada por hora, conducida por alguno de los integrantes de la familia, en la que se recorre la bodega durante aproximadamente una hora y no se dejan detalles por conocer; en la misma normalmente no se da para degustar, pero si alguien desea probar los vinos puede visitar el restaurante a pocos metros de la bodega, donde, si bien no llegué a almorzar, escuché comentarios positivos sobre la calidad y el precio de los platos. También hay una bonita sala de cata, donde se hacen degustaciones a cargo de un sommelier, actividad arancelada y con reserva previa.

La primera añada que se vinificó fue la 2007 y los vinos que actualmente tienen a la venta son: Cabernet Franc 2008, Blend 2008, Pinot Noir 2009 y Chardonnay 2009. Sobre el final de la visita, pasé por el restaurante donde compré algunas botellitas y dulces (también de elaboración propia). Ahí mismo pude probar todos los vinos; en líneas generales, el Blend fue el que más me gustó, y el Chardonnay al que sentí más pobre. Debido a que son partidas muy limitadas, éstos únicamente se venden en la bodega o en algunos locales de la zona.

Dato importante: el proyecto es asesorado por Rubén Sfragara, quien además de haber sido enólogo de Navarro Correas y Luigi Bosca, desde hace diez años está nada menos que al frente de Bodega Alta Vista y también asesora otros proyectos en zonas no tradicionales, como Las Cañitas en Córdoba.

Aprovechando la estadía en Villa Ventana, visite un pequeño almacén de productos gourmet donde encontré otros vinos de la zona, más precisamente del local Finca Cerro Colorado (Tornquist) y de Bodegas Al Este (Médanos, muy cerca de Bahía); a los más golosos les recomiendo probar los alfajores Mamuelquen.



Degustación de algunos vinos de la región:


• Finca Cerro Colorado Malbec 2006. $ 30/bot.
De intenso color; nariz frutal (ciruela), limpia y de intensidad media; buen volumen en boca, repite la fruta, agradable, equilibrado, levemente astringente y de final apenas amargo, pero no molesta.

• Ventania Cabernet Franc 2008, Bodega Saldungaray. $ 32/bot.
Con aromas de tomate asado y algo de pimientos; en boca se mostró algo corto, más herbáceo y con predominio de amargos.

• Al Este Cabernet/Malbec 2007. $ 25/bot.
Nariz dulce, notas que recuerdan al aporte del roble mezcladas con algunas notas salobres; de un paso por boca bastante discreto y con retro algo mentolado, desmejoró rápidamente.

• Terrasabbia Reserva Malbec 2006, Bodega Al Este. $ 34/bot.
Se repiten varias notas similares al vino anterior, pero mucho mejor amalgamadas: me refiero al aporte del roble, la fruta dulce, algunos mentolados y cierto aroma salobre que probablemente ya sea característico de la zona. En boca, equilibrado, de ataque dulce, fluido y marcada acidez (cítrica y pareciera poco natural).
Este último, junto al primer vino catado, fueron los preferidos por quienes participaron de la degustación.

Conclusión:

Al degustarlos, me quedó una sensación de sobre valuación en sus precios por los mismos valores en el mercado local puedo encontrar vinos de calidad algo superior, pero esta sensación se atenúa cuando pienso en la región, el nuevo terroir, el posible potencial que se empezará a descubrir año a año, y el hecho de que es oportuno darle la posibilidad a la vid de encontrar su lugar, la misma posibilidad que le debemos dar a quienes conducen los proyectos para sacar lo mejor de la zona. Esto va a llevar mucho tiempo y lo más lindo es que nosotros vamos a ser testigos de este crecimiento.

Seguramente, algún día podamos decir con orgullo que nuestra provincia también posee “grandes vinos”.

Para visitar la web de Bodega Saldungaray haga click aquí.

Las fotos son del archivo de Mr. Wines.