El lunes 17 tuve el agrado de compartir una degustación de Malbec junto a la gente del Club Premier del barrio de Caballito. La cita, con asistencia perfecta (18 personas), comenzó a las 21 hs puntual a cargo de quien suscribe.
Nuestro objetivo, además de pasar un rato ameno y agradable, era dar a conocer algunas etiquetas de vinos no tradicionales, reconocer las características principales del cepaje en cuestión, y distinguir los diversos estilos y rango de precios de los vinos degustados.
Las empanadas (de carne y pollo) preparadas por Marita, la anfitriona, acompañaron de manera espectacular, y la charla que originalmente estaba planeada para no mucho más de una hora se extendió hasta cerca de la medianoche.
El primer vino de la noche, como para empezar a calentar los motores, fue el Portal del Alto Malbec 2009(Cafayate, Salta). Hubo que esperar un ratito para disfrutarlo, ya que su temperatura estaba algo baja. Llegado el momento, todos coincidieron en que, por su liviandad, fluidez en boca y características frutales, era ideal para abrir la noche. Según Tato (esposo de Marita), fue muy acertado haber empezado con un vino tan bebible.
Le siguió el turno al Calatayud Malbec 2009 de Bodega Altos Viñedos (Vistaflores, Valle de Uco, Mendoza). Ya con más complejidad e intensidad aromática (algo de roble) que el anterior, resultó ideal como compañero de la primera tanda de empanadas. Por lo bajo, un asistente mencionó que se parecía a un cabernet que era de su agrado, mientras que otro opinaba lo bien que acompañaría un trozo de carne asada jugosa.
Ahí nomás llegó el Bournett Malbec Roble IG 2008 (San Rafael, Mendoza). Con menor carga cromática que el del Valle de Uco (zona de mayor altura), y un importante protagonismo de su crianza en roble, una señorita señaló una destacada nota a mermelada, mientras Esteban decía que su dulzor le resultaba difícil para acompañar algún alimento, y una señora apodada “la Tía” remarcó que por su suavidad lo ubicaba como su preferido hasta el momento.
Luego llegó el turno de una de las etiquetas más reconocidas de esta tanda, el Séptima Malbec 2008 (Luján de Cuyo, Mendoza). De destacable expresión tanto en nariz como en boca, por allí una señorita —creo que se llamaba Georgina— mencionó que sus taninos y acidez se hacían notar, lo que nos daba el indicio de que un tiempito más en botella le servirá para seguir puliéndose favorablemente. En este momento la mayoría de los asistentes coincidieron en que ya estábamos en un rango de precio algo superior y que lo que entregaba esta etiqueta lo justificaba. Y Héctor volvía a confirmar que es uno de sus vinos preferidos.
Para terminar, le dimos lugar a uno que hace muy poco comenzó a abrirse camino en el mercado: el Territorio Malbec 2008 de Bodega Familia Muñoz (Cafayate, Salta), que con la enología de José Luis Mounier, recibió muchos halagos de los participantes y fue una gran sorpresa, ya que hasta el momento nadie había escuchado hablar de la bodega. La primera impresión de los degustadores fue destacar su color intenso, como con cierta viscosidad; y mientras las lágrimas se formaban lentamente sobre las paredes del copón, nos empezaba a anticipar que se trataría de un vino más carnoso, y así fue. Rescato la sencilla y acertada descripción de un joven que estaba a mi izquierda, que dijo: no es muy largo de boca, pero es muy gustoso.
Para cerrar, quiero destacar la buena onda de quienes participaron, y agradecer a Héctor, que fue el encargado de esta convocatoria.
Termino de despedirme de este nuevo grupo de amigos y vuelvo a casa despacio, con el recuerdo de las diferentes sensaciones que cada copa me dejó, y agradeciendo nuevamente el grato momento que la más noble de las bebidas nos regaló.
Nuestro objetivo, además de pasar un rato ameno y agradable, era dar a conocer algunas etiquetas de vinos no tradicionales, reconocer las características principales del cepaje en cuestión, y distinguir los diversos estilos y rango de precios de los vinos degustados.
Las empanadas (de carne y pollo) preparadas por Marita, la anfitriona, acompañaron de manera espectacular, y la charla que originalmente estaba planeada para no mucho más de una hora se extendió hasta cerca de la medianoche.
El primer vino de la noche, como para empezar a calentar los motores, fue el Portal del Alto Malbec 2009(Cafayate, Salta). Hubo que esperar un ratito para disfrutarlo, ya que su temperatura estaba algo baja. Llegado el momento, todos coincidieron en que, por su liviandad, fluidez en boca y características frutales, era ideal para abrir la noche. Según Tato (esposo de Marita), fue muy acertado haber empezado con un vino tan bebible.
Le siguió el turno al Calatayud Malbec 2009 de Bodega Altos Viñedos (Vistaflores, Valle de Uco, Mendoza). Ya con más complejidad e intensidad aromática (algo de roble) que el anterior, resultó ideal como compañero de la primera tanda de empanadas. Por lo bajo, un asistente mencionó que se parecía a un cabernet que era de su agrado, mientras que otro opinaba lo bien que acompañaría un trozo de carne asada jugosa.
Ahí nomás llegó el Bournett Malbec Roble IG 2008 (San Rafael, Mendoza). Con menor carga cromática que el del Valle de Uco (zona de mayor altura), y un importante protagonismo de su crianza en roble, una señorita señaló una destacada nota a mermelada, mientras Esteban decía que su dulzor le resultaba difícil para acompañar algún alimento, y una señora apodada “la Tía” remarcó que por su suavidad lo ubicaba como su preferido hasta el momento.
Luego llegó el turno de una de las etiquetas más reconocidas de esta tanda, el Séptima Malbec 2008 (Luján de Cuyo, Mendoza). De destacable expresión tanto en nariz como en boca, por allí una señorita —creo que se llamaba Georgina— mencionó que sus taninos y acidez se hacían notar, lo que nos daba el indicio de que un tiempito más en botella le servirá para seguir puliéndose favorablemente. En este momento la mayoría de los asistentes coincidieron en que ya estábamos en un rango de precio algo superior y que lo que entregaba esta etiqueta lo justificaba. Y Héctor volvía a confirmar que es uno de sus vinos preferidos.
Para terminar, le dimos lugar a uno que hace muy poco comenzó a abrirse camino en el mercado: el Territorio Malbec 2008 de Bodega Familia Muñoz (Cafayate, Salta), que con la enología de José Luis Mounier, recibió muchos halagos de los participantes y fue una gran sorpresa, ya que hasta el momento nadie había escuchado hablar de la bodega. La primera impresión de los degustadores fue destacar su color intenso, como con cierta viscosidad; y mientras las lágrimas se formaban lentamente sobre las paredes del copón, nos empezaba a anticipar que se trataría de un vino más carnoso, y así fue. Rescato la sencilla y acertada descripción de un joven que estaba a mi izquierda, que dijo: no es muy largo de boca, pero es muy gustoso.
Para cerrar, quiero destacar la buena onda de quienes participaron, y agradecer a Héctor, que fue el encargado de esta convocatoria.
Termino de despedirme de este nuevo grupo de amigos y vuelvo a casa despacio, con el recuerdo de las diferentes sensaciones que cada copa me dejó, y agradeciendo nuevamente el grato momento que la más noble de las bebidas nos regaló.
Todo tiene que ver con todo Fernando, y así fue como juntos: el espacio del club,la selección de degustadores, vos y los vinos generó esta tan grata convinación.
ResponderEliminarEsperemos que se repita!!
Un abrazo
Marita
Buenisimos los vinos Fernando y las empanadas de Marita.
ResponderEliminarExcelente gente, muy buen clima y degustación.
Que se repita!
Un abrazo y Gracias por la invitación.
Eduardo.